La actriz actriz catalana protagonizó la segunda jornada del VI MUJERES QUE NO LLORAN, donde estuvo acompañada por Ángeles Maeso (CIMA), codirectora del ciclo. Ambas participaron en un coloquio con el público tras la proyección de ‘Family Tour’, de Liliana Torres. Una película que, en palabras de la intérprete, fue “una experiencia atípica, maravillosa y enriquecedora”.
El regreso de la cineasta Liliana Torres a casa de sus padres para pasar unas vacaciones es el punto de partida de esta historia intimista que Torres escribió cuatro años antes de rodarla en 2013. “La secuencia en la que le regalo un búho que traigo de México a la niña de 11 años –prima de Liliana Torres– me atrapó. Hubo algo en su mirada que fue una catarsis para mí. De repente, me transporté a mis 11 años. Además, mi madre murió a la misma edad que la madre de la prima de Liliana… Ese fue mi ‘family tour’ dentro de ‘Family Tour’”, recordó Gago en la que fue la segunda sesión del ciclo organizado por CIMA con la Fundación Academia de Cine y la participación y patrocinio de AISGE.
Acompañada por Ángeles Maeso, codirectora del ciclo, Gago rememoró su experiencia en la película, donde encarna a la propia Liliana Torres, que no asistió al encuentro porque está rodando en Galicia su segunda película.
La intérprete de ‘Héctor’ y ‘Requisitos para ser una persona normal’, recordó que Liliana Torres colocó a toda su familia ante la cámara en esta producción autobiográfica que terminó siendo una terapia personal que los cambió a todos. “Ella quería contar esa época de su vida, cómo se sintió en esa etapa adolescente en la que era difícil comunicarse con su familia cuando venía a visitarlos. No es que no hubiese amor, pero sí muchos anhelos frustrados, expectativas y la dificultad de entenderse y comunicarse entre ellos”, explicó.
La realizadora buscó a su actriz vía casting y, tras ver a 114 candidatas, apareció Gago. “Casi no hubo ensayos previos para no perder la espontaneidad y la naturalidad, aunque hablé previamente con los padres de Liliana para hacerme una idea de cómo era su día a día en la época que íbamos a retratar. Flipé con la generosidad de su familia porque todo lo que se ve es real, utilizamos la ropa de los personajes, sus casas, sus cosas… y si alguna situación no lo era, Torres me decía que era algo que se podría haber dado en la vida real perfectamente”, desgranó la actriz.