En una entrevista concedida a Nando Salvá en El Periodico de Catalunya, la cineasta francesa Tonie Marshall, que acaba de estrenar en España la película ‘La número uno’, sentencia: “Las mujeres debemos dejar de ejercer de víctimas”.
La directora, que dedica su película a los obstáculos machistas con que tropieza una alta ejecutiva, asegura que en el entorno que se recrea en su película la misoginia es más intensa. “Sí, porque se manifiesta de dos maneras. Por un lado está la misoginia frontal y explícita, que es ancestral. Pero también hay otra forma de sexismo que descubrí durante mi investigación, y que llamaría misoginia benevolente. Es una actitud paternalista y condescendiente que no pretende humillar a la mujer pero sí la infantiliza, y parece sugerir que los hombres nos están aceptando en ese mundo para hacernos un favor. Y sin duda eso hace que las mujeres interioricen la idea de que no merecen ocupar el poder, cuando lo cierto es que el mundo funcionaría mejor si la mitad de las grandes empresas tuvieran liderazgo femenino”.
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